domingo, 9 de septiembre de 2012

Hace ya, cinco meses.

Al fin encontré la inspiración para iniciar el cierre de este ciclo, de este blog que inicié hace tanto, abandoné por ratos, este lugar en el que con mucha frecuencia deposité mis ilusiones, mis alegrías, mis penas, mis frustraciones y este blog que pronto cerrará un ciclo en mi vida.

Hace cinco meses que volví, no sabía que había transcurrido ya tanto tiempo, pero al parecer el tiempo vuela cuando menos te lo esperas, no se que tanto debo decir, lo que una vez creí tan importante ya no lo es y los detalles de vuelven difusos cuando dejas de repasarlos tantas veces en tu mente.

Lo que si recuerdo con total claridad fue el día que me despedí de las personas con las que viví nueve meses de mi vida, recuerdo perfectamente como se sintió ese último abrazo a mis niños, con sus trajes de baño mojados, lo mucho que los abracé y les dije cuanto los quería, sin importarme que mi ropa se estuviera mojando, la incredulidad de sus caritas, a los tres años no comprendieron que no iban a volver a verme, para ellos era normal no verme durante el fin de semana en el que me mudaba a casa de mis amigas a pasar mis días de descanso, para ellos era normal, para mi también, pero esta vez no iba a volver.

Recuerdo perfectamente abrazar a mi niño grande, el a diferencia de mis bebés sabía perfectamente lo que iba a suceder, el sabía perfectamente que no me volvería a ver, recuerdo como me abrazó con fuerza, la manera en que parpadeaba constantemente para no llorar, sus palabras de despedida, sus palabras de cariño y la promesa de que no me olvidaría, recuerdo que quise llorar pero me aguanté. Recuerdo abrazar a mi Host Dad, con el que realmente nunca tuve ningún problema, salvo el amor ciego hacia su esposa y su imposibilidad de ver más allá de lo que ella le permitía, recuerdo la mirada de mi Host Mom, recuerdo perfectamente ese gesto petulante que hacía al torcer la boca, recuerdo no saber si abrazarla o no, recuerdo ese sentimiento horrible de no querer volver a verla en mi vida, ese sentimiento que nunca quise tener, porque el resentimiento es algo horrible. Recuerdo cada instante.

También recuerdo el momento más feliz de todo este viaje, recuerdo ver a mis padres de nuevo, recuerdo que no reconocí a mi hermana, con esa ropa que no sabía que tenía, verla más delgada y alta, más grande, más madura, no mi hermana pequeña, recuerdo el grito de alegría que dejé salir de mi boca, recuerdo tirar mis maletas y correr a abrazarlos, recuerdo que no me importó que todo el mundo me mirara, recuerdo que ese día es uno de los pocos que he visto a mi papá llorar, pura alegría y gozo en sus ojos, pero aún más que eso, recuerdo sentirme completa, después de nueve meses, recuerdo sentirme en casa sin haber ni siquiera llegado.

No me arrepentí ni un instante de la decisión que había tomado, desde el momento en que la tomé supe que fue la correcta.

Hace ya cinco meses. Que rápido pasa el tiempo.

4 comentarios:

  1. Ay! me hiciste emocionar! Muy hermoso lo que escribiste!

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  2. Hola, pues te cuento que ayer cumpli un mes aca en Estados Unidos, he estado leyendo tu blog y no te imaginas can identificada me siento, me lo recomendo una amiga que sabe los momentos tan dificiles por los que estoy pasando, seguire leyendo, estoy segura me sera de mucha ayuda :)

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  3. Nena lei tu blog en un dia, yo estoy en el proceso aun, me alegra que estes con tu familia de nuevo y te agradezco muchisimo por compartir tu experiencia con nosotros, no nos olvides, escibenos almenos la ultima entrada contandonos que fue de ti, si iniciaste la universidad de nuevo y como va tu vida, un abrazo y gracias!

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  4. Que mal que tu host mom fuese tan molesta :(

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